Soraya Sánchez
Psicóloga sanitaria
Nº de colegiado: AN09308
FORMACIÓN
Licenciada en Psicología por la Universidad de Granada en el itinerario de Psicología Clínica y de la Salud. Complementé la especialidad en la rama de Clínica con el Máster de Psicología General Sanitaria por la Universidad de Sevilla. Con los años he ido especializándome en mediación familiar y en trastornos de la conducta en población infanto-juvenil. Así como una especialización en atención temprana e intervención en trastornos del espectro autista y trastornos específicos del lenguaje. Durante un año estuve formándome en la unidad de Psicología Clínica del Hospital Universitario Virgen del Macarena, en Sevilla, donde adquirí conocimientos en la evaluación e intervención de pacientes. En la actualidad sigo con mi formación en las nuevas herramientas y terapias de tercera generación. Estoy colegiada por el Colegio Oficial de Psicólogos de Sevilla (AN09308).
EXPERIENCIA PROFESIONAL
Tras finalizar la carrera, comenzó mi formación complementaria en Madrid y en Sevilla. Durante 1 año estuve trabajando en un centro de atención infantil temprana, pero fue durante mi estancia en el Hospital Virgen del Macarena, cuando pude acercarme al mundo práctico de la Psicología Clínica. Posteriormente, trabajé como Psicóloga Sanitaria, durante casi 5 años en un Gabinete de Psicología, en Sevilla. Un centro privado donde se sigue una orientación cognitivo-conductual y de tercera generación, siendo expertas en mediación familiar, donde realice terapia individual, familiar y de pareja con población infanto-juvenil y adulta con diferente sintomatología, trabajando en colaboración con la asociación de trastornos obsesivos-compulsivos de Sevilla. En la actualidad trabajo como psicóloga sanitaria en una de las Clínicas Origen de Málaga.
OTROS DATOS
Con los años en mi profesión he observado la importancia de no perderse en el camino del otro: “¿Puedo ser suficientemente fuerte como persona como para distinguirme del otro? ¿puedo respetar firmemente mis propios sentimientos y necesidades, al mismo tiempo que los de la otra persona?…
cuando logro sentir con libertad esta capacidad de ser alguien distinto al otro, descubro que puedo comprenderle y aceptarle con mayor profundidad, porque no temo perderme a mi mismo” Rogers, 1961