Obesidad
Sintomas, consecuencias y tratamiento para la obesidad
¿Qué es la obesidad?
La obesidad psicógena hace referencia a los factores psicológicos como causa de los problemas en el sobrepeso. Muchas personas que presentan problemas de obesidad también luchan con problemas relacionados con su estado de ánimo, autoestima, regulación emocional, calidad de vida e imagen corporal.
En la actualidad la obesidad es reconocida como un problema de salud pública. Es una de las principales epidemias de salud con las que el ser humano lucha para lidiar con ella.
En las últimas décadas, la población comenzó a culpar a la comida rápida como principal causa del aumento de la obesidad. Sin embargo, muchas investigaciones demuestran que la comida rápida no es la única fuente de obesidad. El creciente problema de la obesidad no puede atribuirse solo a la industria de la comida rápida, sino a la dificultad autocontrol en la ingesta de comida, ya sea en frecuencia o en cantidad. Y, ¿a qué se debe esta ansiedad por la comida?, ¿intentamos sentirnos mejor comiendo más?, ¿Cómo podemos identificarlo y tratarlo?
¿Qué es la obesidad psicógena?
Cuando hablamos de obesidad psicógena, nos referimos a que la ingesta excesiva de alimentos y el consiguiente aumento de peso, se debe a la dificultad que tiene la persona para la gestión de sus emociones y las dificultades del día. Ante esta dificultad, utiliza la ingesta para calmar y aliviar su malestar. Este patrón, al irse retroalimentando con los años, deriva en problemas en la salud física y emocional de la persona. Un ejemplo de este tipo de comportamiento sería, cuando se produce un incremento de peso a causa de la tristeza o ansiedad que nos produce atravesar un momento difícil en nuestras vidas, intentando calmar ese sentimiento a través de la comida.
Comer desde la tristeza o el estrés puede ser muy perjudicial para nuestra salud, es por eso por lo que tenemos que tener en cuenta este tipo de obesidad ya que con el paso del tiempo se puede ir haciendo cada vez más severa si la persona consigue calmarse al ingerir comida que fisiológicamente su cuerpo no necesita.
Hoy en día, la incertidumbre se ve reflejada en muchas personas a nivel mundial debido a que tendemos a recibir noticias que pueden afectar negativamente en nuestros sentimientos y sensaciones, siendo muy fácil recurrir a la comida como recurso fácil, pero perjudicial.
Dedicar menos tiempo a las actividades que nos ayudan a desconectar o sentirnos mejor hace que nos encerremos en nosotros mismos dependiendo de nuestras emociones y pensamientos. Como resultado de nuestro comportamiento inconsciente en estas situaciones, tendemos a desarrollar diferentes estrategias que justifican la excesiva ingesta de comida con el fin de disminuir la ansiedad y el malestar. Por último y para darnos cuenta de la importancia de cuidar nuestro cuerpo hay que comentar que la obesidad es el quinto factor de riesgo de mortalidad en el mundo siendo así un importante riesgo de salud.
¿Quieres saber la gravedad de tus síntomas?
Te invitamos a que realices un cuestionario para que valores cómo y de qué manera estás sufriendo obesidad psicógena. Tan sólo tienes que hacer click en este link:
¿Cuáles son los síntomas de la obesidad?
Cada persona puede sufrir obesidad de manera distinta, pero hay una serie de síntomas que son comunes y generalmente compartidos por las personas que tienen problemas con la misma. Para que puedas comprobar y comparar si la estás padeciendo vamos a presentarte los más comunes:
- Que la persona sufra un peso excesivo, es decir, cuando el índice de masa corporal sea superior a 30
- Cuando el exceso de peso te hace sentir más cansado, sintiendo también que te cuesta más respirar y te limita la movilidad.
- Te resulta más complicado de lo normal realizar alguna actividad deportiva
- La calidad del sueño se te puede llegar a alterar
- Puede haber repercusiones físicas, tales como dolores de rodilla o espalda
- Cuesta controlar la cantidad de comida que ingieres
- No consigues tener una sensación de saciedad
- Tendencia a comer comida hipercalórica
¿Qué produce la obesidad?
El origen de la obesidad psicógena puede derivarse en múltiples factores que afectan a cada persona de distinta manera. Principalmente podemos destacar:
- Problemas de regulación emocional
- Estilo de vida sedentario
- Estrés
- Manejo de la ansiedad a través de la comida
- Tras la experiencia de trauma o un evento de alto impacto emocional
¿Cuáles son sus consecuencias?
La obesidad afecta negativamente en nuestra salud, pero también influye en nuestra vida personal y laboral. Las repercusiones pueden ser múltiples y muy variadas.
Entre las consecuencias físicas más comunes que acaban derivando en problemas de salud podemos encontrar:
- Diabetes tipo 2
- Cáncer
- Enfermedades cardiovasculares, como por ejemplo un infarto.
- Problemas respiratorios, donde la persona al subir las escaleras le cuesta coger aire.
- Dislipidemia. Una persona que padezca niveles altos de colesterol.
- Problemas de rodilla debido al exceso de peso que afecta a las articulaciones, provocando por ejemplo artrosis.
Por otro lado, otras de las áreas afectadas en nuestro entorno social y personal son:
- Ocio: la persona deja de ir a sitios donde su físico pueda estar expuesto dejando de realizar ciertas actividades, como por ejemplo ir a la playa a bañarse con los amigos. Esto tendrá consecuencias en su estado de ánimo y en su vida personal.
- Amistades: se pueden llegar a sufrir problemas interpersonales con la gente cercana, donde los amigos aconsejan e incitan a que la persona se cuide más aumentando aún más el problema. También puede tener conflictos con gente ajena sobre algún comentario ofensivo o pensamiento que pueda tener sobre su físico
- Familia: la persona se va a sentir triste, con ansiedad y frustración al verse físicamente peor. El miedo de lo que pensaran de él puede llegar a provocar de forma involuntaria tensión entre los familiares. Así como las limitaciones físicas que muestre, le afectarán en el disfrute de las actividades en familia.
- Trabajo: la obesidad con el paso del tiempo produce cansancio y malestar general pudiendo afectar en el área laboral. Al sentirnos con baja autoestima, nos encontramos inseguros en la toma de decisiones y lo transmitimos en las tareas laborales. Al no descansar bien, podemos tener problemas de atención y concentración, tan importante en el desempeño diario laboral.
- Desarrollo personal: se dejan de atender aspectos importantes del desarrollo de la persona, ya que deja de quererse a sí misma teniendo un problema grave de autoestima. La persona también puede quedarse estancada debido a la inseguridad impidiéndole un desarrollo personal óptimo.
¿Cuál es el tratamiento de la obesidad?
Desde Clínicas Origen trabajamos la obesidad psicógena de manera multidisciplinar. Dos de esas disciplinas son la nutrición y la psicología, centrándose en cambio de hábitos nutricional y de actividad, así como los hábitos emocionales. A continuación, vamos a explicar la parte psicológica, parte clave para abordar la obesidad psicógena, que nos llevará a resultados de pérdida de peso, no solo a corto sino a medio y largo plazo.
La ayuda de profesionales es fundamental para diagnosticar el mejor tratamiento que complemente tanto a la pérdida de peso como a la recuperación de la autoestima y bienestar.
Nuestro entorno social es uno de los factores indirectos que marcarán la diferencia en un buen tratamiento. La ruptura de los cánones de belleza establecidos por la sociedad ayudará a combatir los complejos e inseguridades de la persona afectada.
Entre los tratamientos para la obesidad psicógena encontramos la práctica de técnicas como el mindful eating que nos ayuda ser consciente del “aquí” y el “ahora” en los momentos de ingesta, evitando la aparición de pensamientos irracionales, tomando conciencia de la saciedad, de lo que comemos, pudiendo controlar la ingesta de comida de una manera consciente y cómoda.
En nuestras clínicas empleamos un tratamiento psicológico con el que entenderás y podrás poner en marcha las diferentes estrategias y herramientas necesarias para la reducción de peso y la recuperación de hábitos saludables. Nos basamos en la orientación cognitivo-conductual desarrollada en tres áreas: comportamiento, emociones y pensamientos. A través de la modificación y aplicación de nuevas técnicas en estas tres áreas podrás observar de forma progresiva una mejora tanto en tu bienestar físico como psicológico.
Entro los resultados que hemos podido recoger tras el desarrollo de nuestro tratamiento con pacientes en clínica, encontramos:
- Reducción de peso
- Cambio en los hábitos diaria
- Mejor gestión de las emociones
- Control en la ingesta de alimentos
- Disminución de los problemas asociados a la Obesidad
- Mejor calidad de vida, autoestima y confianza en uno mismo.
Estos son algunos ejemplos de estrategias para tratar la depresión, pero como hemos comentado anteriormente, cada persona es distinta y necesitará trabajar algunos aspectos más que otros. También hay estrategias para afrontar el duelo, para no dejarse llevar por los pensamientos negativos, para organizar y planificar las tareas disminuyendo así el estrés y la sobrecarga, etc.
Los resultados que se pretende alcanzar con estas estrategias y tratamientos son mejorar el estado emocional y recuperar la dinámica de la vida diaria de la persona. También se pretende obtener una visión más realista y optimista de la vida.
¿Cómo ayudar a un amigo o familiar con obesidad?
Un gran número de las personas con obesidad psicógena afirman que es complicado recibir la ayuda de aquellos quienes les rodean. Saber cómo ayudar a un ser querido puede guiarlo a alcanzar sus objetivos a la hora de perder peso, mientras que la falta de conciencia y conocimiento puede sabotear su éxito. Aunque algunas personas pueden hacer cambios en su estilo de vida y vencer la obesidad por sí solas, la mayoría necesitan ayuda adicional.
A continuación, queremos ofrecer algunos consejos sobre cómo desempeñar un papel positivo en el sistema de apoyo social de nuestro amigo o familiar para ayudar a fomentar su éxito, mantenerlo encaminado y evitar obstaculizar su progreso.
En muchas ocasiones miramos la obesidad como el abandono de nuestro cuerpo, una mala etapa o un cambio de vida con hábitos poco saludables, pero debemos entender que la obesidad que nuestro ser querido pueda tener es una enfermedad y que no desaparece con decir “debes comer mejor”, “debes tener fuerza de voluntad”. Para ello, lo primero que debemos hacer es estar bien informados para saber cómo puede la obesidad estar afectando a la persona cuando no somos nosotros los que experimentamos ese estado. Expresar nuestra preocupación hará que aquellas personas con obesidad reciban el mensaje de apoyo y se puedan llegar a sentir respaldadas. Hay que intentar transmitir que estamos ahí para ellos y que su bienestar y salud es lo que más nos preocupa.
Debemos ser positivos y demostrar que creemos en su capacidad para salir del bucle que le produce depender de la comida para sentirse mejor y que nuestra confianza está puesta en ellos para que alcancen sus objetivos.
Es importante evitar que la persona se sienta culpable de su estado. Para ello, intentaremos estimular y generar expectativas realistas que puedan ir abriendo camino a la solución del problema.
Por otro lado, es de gran ayuda intentar proporcionarles buenos recursos tanto terapéuticos como médicos o nutricionales. Es posible que no sepamos a quién acudir o a quién recomendar si nunca hemos pasado por algo parecido. Encontrar estos recursos y guiar a nuestro amigo o familiar hacia un profesional de la salud mental hará que este pueda diagnosticarle y brindarle el tratamiento que necesite empezar a seguir.
Si tu amigo o familiar está luchando contra la obesidad, puedes ser tú quien desempeñe un papel positivo alentando su éxito; haciéndole saber que te preocupas por él, celebrando su progreso y proporcionándole el tratamiento profesional necesario.