¿Sabemos cuál es la diferencia entre VIH y sida?
El virus de inmunodeficiencia humana o VIH es el virus que puede llevar al sida, pero las personas que viven con este virus pueden o no tener desarrollarlo.
La estigmación y discriminación hacia las personas con VIH sigue siendo un gran problema al que hay que hacer frente. Todos tenemos que hacer posible una relación basada en el respeto mutuo y el fortalecimiento de los valores sociales y los derechos humanos de todos.
La relación entre el VIH y la salud mental
La ansiedad, la depresión, el estrés y la dificultad para descansar son algunas de las enfermedades de salud mental más comunes que suelen sufrir las personas que tienen VIH por todo lo que han vivido históricamente.
Cuando nos dan un diagnóstico positivo de VIH, la reacción más común puede ser pánico o desgana de seguir luchando por una buena recuperación. Esto no debe sucedernos, ya que existen tratamientos que paralizan el virus y te hacen INDETECTABLE, es decir, que ni avanza el virus ni puedes transmitirlo. Una buena gestión en el origen del diagnóstico es imprescindible.
En el momento que dejamos que estos pensamientos o sentimientos se hagan con el control de nuestra mente por padecer una enfermedad que (a día de hoy, afortunadamente, tiene una solución) nos hace débiles y nos vuelve víctimas de estos problemas, pero ¡que no pueda contigo! hay esperanza para encontrar la cura definitiva del VIH y como hemos comentado, gracias a la ciencia, se han conseguido reducir los diagnósticos. ¡Las cifras son muy esperanzadoras!
Por ello, es fundamental que seamos conscientes y que estemos pendientes de cuidar nuestra salud ya sea física o mental.
Esto será la clave – Haz fuerte a tu cuerpo y a tu mente.
¿Es posible que las personas con VIH sufran problemas de salud mental?
Si buscabas una respuesta a esta pregunta… la respuesta es SÍ. Pero como cualquier otra persona.
La mayoría de personas que sufren esta enfermedad, por ende, son también pacientes de psicología o psiquiatría debido a que esta enfermedad les puede generar un sentimiento de tristeza y de vacío que les lleva a padecer enfermedades que alteran su salud mental. Pero afortunadamente, no en todos los casos.
Ante esto, existen una serie de señales que nos alertan de que podemos estar iniciando algún problema que altera nuestra estabilidad y no solo provocada por el diagnóstico, veámoslas:
- Pérdida de interés en actividades que antes sí que generaban interés.
- Sentimiento de tristeza persistente y sensación de vacío.
- Pensamientos suicidas.
- Sentimiento de estrés y ansiedad.
Es muy importante que tengamos en cuenta que son cosas que se pueden tratar y por lo tanto que nos podemos recuperar.
Principales causas de los trastornos de salud mental en personas con VIH
Pero… ¿Cuáles son los factores que aumentan el riesgo de problemas de salud mental?
- Cambios importantes en el estilo de vida tras el diagnóstico.
- Experiencias negativas (traumas, abusos…), no aceptación de la enfermedad.
- Factores biológicos.
- Problemas familiares.
Y… ¿qué situaciones pueden contribuir a la salud mental de un paciente VIH?
- Dificultad para contar el diagnóstico del VIH. Nosotros apoyamos la VIHisibilidad, para que la persona viva en su libertad.
- Discriminaciones sobre el VIH.
- Pérdida de apoyo social y aislamiento.
- Dificultad de recibir servicios de atención a la salud mental.
Además de todas estas causas y situaciones que originan este tipo de enfermedades, no debemos de olvidar que algunos de los medicamentos recetados anteriormente para el tratamiento del VIH, pueden tener efectos secundarios que pueden afectar a la salud de una persona, pudiendo incluso, llegar a provocar otro tipo de trastornos. Pero, esos fármacos están debidamente testados y son efectivos, sin más efectos secundarios que cualquier médicamente para otras dolencias que podamos tomar.
Tengo VIH, ¿Qué hago?
Si eres paciente de VIH y no sabes cómo afrontarlo o tratar los problemas que puedan surgir y alterar tu día a día, aquí tienes unos tips que te ayudarán a superar las barreras y los complejos que conlleva el diagnóstico de esta enfermedad.
Únete a un grupo de apoyo – ¿Por qué no conocer a otras personas que estén pasando por lo mismo que tú? Ábrete y relaciónate. Comenta con otras personas cómo te sientes en tu día a día y escucha los consejos que pueden darte aquellos «veteranos» del VIH. ¡Ell@s son un pilar fundamental!
Prueba rutinas de yoga, meditación y prácticas con la respiración – Controla tus sentimientos, tus impulsos y tus malos pensamientos. Practica respiraciones con estas rutinas que te ayudarán a relajarte y a escapar de la ansiedad y de los malos pensamientos que nos pueden absorber en alguna situación de bajón.
Duerme bien, come bien y estate físicamente activo – No dejes tu cuidado personal atrás, no dejes de verte bien y sobretodo no dejes que esta enfermedad acabe contigo, porque hoy en día es una enfermedad crónica y no mortal. Si tu estás bien, tu mente está bien.
Por cierto, este tipo de consejos, no es solo válido para personas portadoras del VIH, ¡sirve para todo el mundo! Una buena rutina de ejercicio, alimentación estilo de vida y relación con los demás, es importantísimo para cuidar nuestra salud mental.
Clínicas Origen, una apuesta por tu salud mental
Desde nuestras clínicas ayudamos a cualquier persona que quiera ayudarse, en cualquier ámbito cuenta con nosotros.
Si no sabes cómo te sientes o en qué situación estás, en nuestra web encontrarás tests de depresión y otras enfermedades que te darán un previo diagnóstico para saber si padeces alguna de ellas. También contamos con terapias para superar la ansiedad, la depresión… u otras alteraciones de la salud mental que puedan surgir.
En Clínicas Origen estamos para escucharte y ayudarte a superar todo aquello que te propongas. Y principalmente, si acabas de recibir un diagnóstico positivo en VIH o lo estás viviendo de cerca y no sabes cómo afrontarlo o gestionarlo… ¡Estamos contigo. Cuenta con nosotros!
¡Te esperamos con los brazos y el corazón abiertos! ❤️
