La situación actual está dejando una huella psicológica en todos los españoles de mayor o de menor medida. Ahora mismo algunos tienen más libertades de movilidad al estar en fase 1 y otros aun tienen que esperar para eso.
Los que viven en la misma ciudad y están en fase 1 tienen la oportunidad de reencontrarse con su familia y seres queridos y, según nuestros psicólogos, responderán con diferentes reacciones:
- Veremos grupos de personas sin mascarillas. Este perfil estará asociado a gente joven (aunque no es exclusivo de este sector)
- Veremos grupo de personas que salgan y mantengan las distancias de seguridad. Estas personas tienen preocupaciones, pero no serán una limitación en su día a día
- Personas que seguirán sin salir de casa por miedo al contagio. Este perfil evitara cualquier tipo de contacto.
La sociedad española es más expresiva a través del comportamientos no verbal y el contacto, que a través del verbal, pero durante los reencuentros vamos a tener que potenciar la parte verbal, expresar el afecto con palabras, dado que también la mascarilla va a estar de barrera, por lo que la expresividad no verbal también va a estar limitada, los ojos seguirán siendo nuestros aliados, así como el tono, es probable que en los primeros encuentros lo subamos para expresar nuestra alegaría, lo cual es positivo para que genere impacto en la otra persona.
Los reencuentros serán para aquellos que se encuentren en la misma provincia y en la misma fase, pero ¿qué ocurre con los que están en fase 0?
Será normal que estas personas sientan frustración y enfado. Al principio se quejarán, pero acabarán aceptándolo y seguirán implicándose en su comunidad para continuar avanzando.
Y, ¿qué ocurre con aquellos que tienen a sus seres queridos en otras provincias?
La familia en la sociedad española tiene un importante peso en la vida y el bienestar de las personas. Habrá personas a las que les cueste continuar tiempo en distancia de su familia, y les pase factura a nivel emocional. Sobre todo, aquellas que viven solas.
