Una ruptura de pareja es de las situaciones más difíciles y la solemos asociar a la soledad y al vacío. Sentimos un deseo irrefrenable de que vuelva esa persona a nuestras vidas o que se rellene el vacío que nos ha dejado; el “hoy” que nos imaginábamos ayer ya no existe.
En su día nos enamoramos e iniciamos un proyecto de vida que pensábamos iba a ser eterno. Llega un día en que la relación termina y pensamos que nuestra vida también. Lo fundamental es saber que es posible superar esta dura situación, pero al principio es dolorosa y no se puede evitar.
Consejos para superar una ruptura
Vamos a darte algunos consejos que te pueden servir para superar esta situación dificil que no te premite seguir con tu vida. Si te lo propones de verdad no es tan dificil conseguirlo. Solo hay que tener paciencia y ganas.
Acéptalo
El primer paso, y que puede sonar más familiar, es aceptar lo que ha sucedido. Suena a tópico, pero es necesario este paso. La realidad está ahí, ya no estamos con esa persona y debemos asumirlo. Esto también requiere tiempo, pero cuanto antes empecemos, antes lograremos seguir adelante con nuestras vidas.
Una vez lo hayas aceptado, empezarás a ver las cosas desde un punto de vista diferente. Te darás cuenta de que hay más cosas que también te hacen feliz. Como tu familia, tus amig@s, tu compañeros de clase o de trabajo, etc. Ten paciencia, poco a poco irás logrando aceptarlo y lograrás seguir con tu vida igual o mejor que antes.
No te lo guardes
Por supuesto, debemos expresar lo que sentimos, llorar o gritar si hace falta, pero comunicarnos con nuestro entorno y expresar lo que sentimos. Sin embargo, es importante también que, pasadas unas semanas, intentemos evitar que llorar siga siendo algo recurrente, puesto que dejará de ser una vía para exteriorizar nuestro estado de ánimo, pudiendo convertirse en un inductor de malestar. Al expresar tus sentimientos, te sentirás más tranquil@ y recogerás opiniones de la gente de tu alrededor. Eso te hará comprender mejor la situación y darte cuenta de que el mundo no se acaba.
Reúnete con tus amigos, habla con ellos. Pero, pasado un tiempo, evitemos que nuestras conversaciones solo se centren en esa persona. Cuando salgamos con amigos o estemos con la familia, intentemos disfrutar de ellos, escucharles, participar en las conversaciones.
No vuelvas atrás
Evita los “y si…” “qué habría pasado si…”. No puedes volver atrás, son situaciones imaginarias. Inconscientemente, idealizamos las consecuencias de haber hecho las cosas de manera distinta para imaginarnos un presente y futuro más satisfactorio. Tienes que ser consciente de que si hiciste las cosas de esa manera en ese momento determinado, es porque creías que era lo correcto.
Pon atención a lo que ocurre aquí y ahora, en lo que tenemos hoy, que es lo único que importa. Más conocido como Mindfulness, el objetivo de esta práctica es la concienciación plena, la concentración de la atención en el presente. Muchas veces, aunque nuestro cuerpo está en el presente, nuestra mente se encuentra en el pasado o futuro, sin dejar que vivamos el aquí y ahora. Pero es fundamental saber dirigir la mente y canalizar los pensamientos y sentimientos al presente.
Un clavo no saca otro clavo
Y esto es muy importante. Tratar de evitar el dolor con otra persona no es la solución. Puede disminuir temporalmente el malestar, pero puede derivar fácilmente a la dependencia emocional. Aprende a vivir sin depender de nadie.
Es cierto que los humanos por naturaleza necesitamos relacionarnos con otras personas para sentirnos valorados y queridos pero si basamos nuestra vida en encadenar nuevas relaciones sin base sentimental no conseguiremos valorarnos como es debido. Primero superalo, aprende a vivir sol@ y lo demás vendrá solo.
Tiempo
Sin duda, el tiempo es nuestro gran aliado. No podemos olvidar a una persona de la noche a la mañana. Es un proceso con sus pasos y estados de ánimo correspondientes, pero con el tiempo nos sanamos y aprendemos que la felicidad no depende de esa persona, si no de nosotros mismos. Un día miraremos atrás y podremos ver la ruptura amorosa con más claridad, es decir, desde un punto de vista objetivo. Además, podremos verlo como una oportunidad de aprendizaje sobre nosotros mismos. Habremos sumado no solo experiencias, sino también herramientas que servirán para afrontar las situaciones futuras de una manera más óptima.
Esperámos que te hayan servido estos consejos y que consigas superar tu ruptura. Es normal pasar por situaciones como esta, no te desesperes y sigue luchando. ¡Mucho ánimo!
